El pacto de sueldos que gobierna la ciudad se limita a cumplir el 56% de los indicadores de participación exigidos por ley en una clara muestra de opacidad
Burriana, 29 de septiembre de 2020: Los indicadores de transparencia que el Ayuntamiento de Burriana está obligado a cumplir por ley constatan el bloqueo informativo al que la coalición PSOE y Compromís someten a la ciudad. La Comisión Coordinadora del Sello Infoparticipa que impulsa la Universitat Autònoma de Barcelona y el Observatorio de Gobernanza, Transparencia y RSC de la Universidad Cardenal Herrera CEU, constata en su informe que la localidad de la Plana Baixa está muy lejos de cumplir los objetivos requeridos.
Desde el Grupo Municipal del Partido Popular en Burriana han lamentado que Burriana solo cumpla el 56% de los indicadores, lo que en la práctica demuestra “que todavía queda mucho camino por recorrer”. Desde el PP, “animamos a la alcaldesa y a sus socios, que ostentan la cartera de Transparencia, a que cumplan los objetivos porque no hacerlo, como ocurre actualmente, atenta contra los principios democráticos de transparencia e información”.
“Somos conscientes de que es una tarea que exige implicación, pero si PSOE y Compromís fueron capaces de alcanzar un acuerdo para subirse los sueldos 100.000 euros, esa entente y capacidad de consenso debería obtenerse también en otros ámbitos de la vida pública, sobre todo aquellos que son deficientes”.
La transparencia, tal y como reflejan los indicadores de la Comisión Coordinadora del Sello Infoparticipa, “tiene todavía mucho camino que recorrer en Burriana para alcanzar los niveles exigidos por ley”. En este sentido, desde el PP “les pedimos que se pongan a trabajar para corregir estos resultados, porque los ciudadanos tienen derecho a conocer los acuerdos y decisiones que adoptan sus gobernantes y a la vez a ser escuchados y obtener una respuesta rápida y eficaz”, ha considerado el regidor.
De poco sirve que se tramiten quejas, se formulen peticiones o se adopten acuerdos en pleno “si luego el grado de cumplimiento es mínimo”. El resultado es, según Clausell, “la desconfianza de los vecinos hacia el gobierno municipal y la desafección hacia una institución que es la más próxima y cercana a los ciudadanos”, ha considerado el edil.